Cuando uno hace los deberes y se le une la buena suerte, la consecuencia directa es el éxito.
El caso sobre el que me centro hoy es el de la consola de videojuegos Wii.
Nintendo está consiguiendo lo que nadie había conseguido antes hasta el momento: descontextualizar la consola de su hábitat natural, acercándola al target no habitual de los videojuegos.
Si PlayStation2, de Sony, provocó el boom del jugador ocasional (casual en inglés), Wii ha logrado ampliar el espectro de jugadores ocasionales a gente que ni tan siquiera se había planteado jugar a un videojuego: padres, abuelos, etc. Incluso hay hospitales que recomiendan su uso con función terapéutica. En definitiva, ha logrado eliminar el estigma de "frikis" que tenían los jugadores.
Lo primero a destacar es su ridículo nombre. Cuando la consola fue presentada oficialmente, los jugadores habituales no salían de su asombro e incredulidad. Todos los nombres de las anteriores consolas de Nintendo tenían un significado concreto y absolutamente todas mostraban el nombre de la compañía nipona de forma explícita (e.g.: Nintendo GameBoy).
Con el nuevo nombre de la consola, Nintendo logra además eliminar el lastre que supone su imagen tópica -ganada a pulso- de compañía especializada en juegos "infantiles". En este caso, la aparición del nombre de la empresa no supone ningún impulso comercial -todo lo contrario que lo que supuso ligar Sony con la primera PlayStation.
Ahora centrémonos en los pilares fundamentales del éxito que están catapultando a la consola por encima de la competencia (XBOX360 y PlayStation3).
Factor I+D.
Nintendo ha sacado una consola tecnológicamente muy inferior a las de Sony y Microsoft. El baluarte de Wii es su mando de control: una barra de plástico con sensores giroscópicos y un puntero de infrarrojos. Con dicho mando, se pueden recrear miles de situaciones: jugar a los bolos, tiro al plato, jugar a tenis, etc.
Las otras consolas también tienen juegos de disparos, bolos y tenis, pero para realizar acciones, estás limitado a pulsar botones. Con el mando de Wii, tienes que mover la mano/brazo para interactuar, dotándole de mayor "realismo".
Por lo que parece, la pregunta que inmediatamente surgió tras la presentación de la consola ("¿que preferirá la gente?¿Mando tradicional o mando de Wii?") ya ha sido respondida.
Factor suerte.
Llamar así a este factor puede resultar muy insultante para los encargados del estudio de mercado pero, espero que lo reconozcan, la situación es un tanto inesperada (¿realmente necesita el mundo analistas?). Hasta "targets" no habituales del ocio electrónico, como mujeres y ancianos, se sienten atraídos por la consola.
Hay que aclarar que esta gran acogida del mercado está ligada al primer factor (el mando) ya que la consola no tiene grandes juegos (tanto Zelda como Resident Evil 4 son versiones adaptadas de juegos para otras consolas). La gente lo que de verdad quiere es jugar a los bolos, jugar al tenis y disparar con el mando en cuestión. Quieren hacer movimientos en el aire como si de verdad estuvieran haciéndolo. Quieren hacer el ridículo. Y quieren hacerlo con sus amigos o familiares. Wii triunfa porque es ocio/diversión social.
Otro ejemplo de ocio social, disfrutado también por targets dispares es bailar. Bailar también es, según tu habilidad, hacer el ridículo con mayor o menor gracia.
Y es que, resumiendo queridos lectores, lo que a la gente de verdad nos gusta es hacer el ridículo, desinhibirnos y, por lo que parece, disfrutamos mientras nos ven haciéndolo y ver cómo lo hacen los demás.
blog sobre diseño y comunicación multimedia
martes, 21 de agosto de 2007
Wii is all around
Asunto/s: ocio, tecnologia
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